Cuán penosa es la tristeza del alma,
esa pena,
que te esconde la sonrisa,
marcando tus arrugas,
resaltando las ojeras,
de tus ojos apagados..
Cuánto dolor debe tener el alma,
en ese andar cabizbajo,
ante la preocupación que abruma
y tal melancolía se apodera,
causando más vejez a tus años..
Qué mal acongoja tu espíritu,
si la música llora,
si el día y la noche,
solo son para ti,
el día que vives,
aunque el río corra,
el viento respire
y el susurro del aire cante..
La pena del alma,
la misma vida,
tantos contratiempos,
aquél hombre que engalana
y defrauda,
todo amor que pierdes,
cada una de tus dudas..
Vive,
dale paso,
a las penas que lloras,
regocíjate de las glorias,
que meritan tu alma,
ella nutre tu cuerpo de buena savia,
aliviando así el dolor que amarga..
Pobre aquél,
que nace con débil karma,
acompañado en su camino,
de su oscura alma,
alma que vive sin penas
y se nutre de glorias ajenas,
arrastrando ruidosas cadenas..
..NDM.