Mar y cielo se nublan,
unidos y lejanos,
confusos, imprevisibles,
así como tus ojos,
de mirada triste e indescifrable,
son la atención, la seducción,
del conjunto de tu rostro
y un mensaje mudo,
para quién te mire..
Esos ojos tuyos,
totalmente terrenales,
se embarcan contigo,
en tu viaje visual,
hacia lugares profundos y ocultos,
que solo a ti pertenecen,
aunque tus labios sonrían,
tu mirada parece estar llorando..
Esos ojos tuyos,
almendrados, enormes,
de color nublado,
indefinidos,
de iris profundo,
donde se puede ver nobleza,
en ese brillo tenue,
donde por momentos,
tu mirada triste, sonríe..
Tú,
totalmente circunspecto,
con mirada invernal
y ojos llorosos,
inaccesibles, herméticos,
oscuros, altivos,
pareces ser, de esos pocos,
de corazón sin carcajadas,
de entregas plenas,
que van andando en su mundo,
buscando la lectura visual adictiva,
que difiera a la suya..
Pareces ser así, inusual,
siempre sereno,
distante, pensativo,
fashion,
exquisitamente atractivo,
llamativamente extraño,
especialmente atrayente..
Sin intención,
por unos minutos,
te observó de soslayo,
admirando al extraño,
de rostro serio, mirada distante
y confusamente hermosa,
que entre los transeúntes,
caminaba abstraído,
con pasos seguros,
llevando en sus manos,
hermosos lirios blancos.
Sin embargo,
tu mirada helada,
brillante, tristemente aletargada,
impenetrable, envolvente,
totalmente cautivadora,
no se cruzó con la mía,
suele pasar,
en el azar,
entre unos y otros,
que tantas veces se cruzan,
y rara vez coinciden..
..NDM.